No hay nada mejor que tomar una ducha refrescante o relajante para iniciar el día o ir a dormir. Sin embargo, este hábito puede afectar la higiene de la cabina de baño. Los restos de jabón, la espuma de champú y los residuos de otros productos de aseo se suelen solidificar en las puertas de vidrio de la regadera. Preocupados por esta realidad, te damos algunas recomendaciones para limpiar las puertas de la ducha.

Ten los productos que vas a necesitar a la mano

Ten los productos que vas a necesitar para limpiar las puertas de la ducha a la mano

Para dejar como nuevas las puertas de la ducha, asegúrate de contar con un buen suministro de agua y reunir lo siguiente:

  • Vinagre blanco destilado.
  • Jugo de varios limones.
  • Un litro de amoníaco.
  • Un litro de agua oxigenada.
  • Bicarbonato de sodio.
  • Jabón líquido, puede ser de lavavajillas.
  • Protector de lluvia para parabrisas.

Algunos instrumentos son necesarios

Después de reunir los productos, busca algunos de estos utensilios.

  • Paños de microfibra.
  • Escobilla de goma para ventana.
  • Atomizador.
  • Estropajos u hojas para secadoras.
  • Cepillo de dientes apto para limpieza.
  • Microondas.
  • Recipiente para microondas.

1. Usa una solución de vinagre

La acidez del vinagre es efectiva para cortar la espuma de jabón. Incluso, aquella que está seca y adherida a las puertas de vidrio y acrílico.

  • En un recipiente que sirva para microondas, vierte una taza de vinagre blanco destilado y caliéntalo por 30 segundos.
  • Luego, llena la botella con atomizador, e incorpora algunas gotas de jabón líquido, y bate.
  • Pulveriza la mezcla sobre la superficie de las puertas, desde la parte superior hasta llegar al área cercana a los pies. Presta especial atención a las zonas con exceso de sucio, deja actuar la solución no mas de 3 minutos.
  • Transcurrido el tiempo, talla con ayuda de un estropajo las puertas. Para las zonas de los rieles o de difícil acceso, puedes tallar con ayuda del cepillo de dientes.
  • Enjuaga con abundante agua. En caso de ser necesario, repite el procedimiento, hasta lograr el resultado deseado.
  • Por último, seca la zona con un paño de microfibra.


Ten en cuenta que si bien no se recomienda el uso de estropajos abrasivos, puedes usar toallitas para secadora. Estas cuentan con la aspereza necesaria para desprender manchas reacias de los restos de jabón, sin causar daño ni raspones en el vidrio. Del mismo modo, espolvorear un poco de bicarbonato de sodio sobre el estropajo o toalla para secadora, antes de comenzar a tallar también te ayudará a acelerar la salida de las manchas.

2. Prueba con jugo de limón

De igual forma que el vinagre, la acidez del limón te ayudará despercudir las puertas de la ducha, además de aportar un agradable aroma a cítrico. En caso de que el piso sea de piedra natural, usa este ingrediente con precaución.

  • Agrega el jugo de 5 limones medianos y una taza de agua al interior de un recipiente con atomizador. Esta mezcla es ideal para manchas leves de espuma o restos de jabón, puedes potenciar el producto si le incorporas una cucharada de bicarbonato.
  • Rocía la zona afectada con la mezcla, y deja que actúe por tres minutos. Pasado el tiempo, frota las puertas con ayuda de un estropajo suave, o si lo prefieres unas toallitas para secadora.
  • Enjuaga con abundante agua, seca y abrillanta con un pañito de microfibra.

3. Limpiar con amoníaco

Limpiar con amoníaco las puertas de la ducha

El amoníaco es un producto que con frecuencia es usado para limpiar vidrios, resulta que tiene la propiedad de limpiar y abrillantar sin dejar rayas. Por otra parte, si estás limpiando la zona con cloro, no uses amoníaco, ya que los vapores que se forman al mezclar ambos productos pueden ser letales.

  • Vierte en una botella con atomizador un litro de agua tibia, y agrégale dos cucharadas de amoníaco de uso doméstico. Antes, abre las ventanas del baño y la puerta principal para garantizar el flujo del aire.
  • Rocía las puertas y deja actuar por 5 minutos. Luego, procede a tallar con un estropajo o hojas para secadora.
  • En este punto, no es necesario enjuagar los vidrios, solo seca el área con ayuda de un paño de microfibra limpio.


Por último, no te olvides de limpiar los rieles de las puertas, en la limpieza del baño cada detalle cuenta. Para ello, llena las pista con agua mezclada con vinagre, y talla con el área con ayuda de un cepillo dental hasta despegar todo el sucio. Vuelve a llenar con agua fresca la pista, para sacar el agua sucia. Y termina secando los rieles. Ten presente que el mantenimiento y el buen olor del baño, dependerán de la frecuencia con la que apliques estos consejos.