Hay diversos tipos de grifos que puedes elegir para las estancias de tu hogar, pero ¿sabes cuáles son los que más te convienen? Descubre las ventajas que ofrece cada uno de ellos para tomar la decisión correcta en función de tus preferencias y necesidades.

Tipos de grifos según su apertura

Monomando

Sin duda, los grifos monomando son de lo más prácticos tanto para la cocina como para el cuarto de baño. Se caracterizan por incorporar un único mando para regular la temperatura y el caudal del agua.

En cuanto a sus ventajas, estas son múltiples. Una de las principales es la comodidad que brindan, ya que con un solo movimiento de la maneta de accionamiento se permite el paso o no del agua. Por si fuera poco, tienen una mayor vida útil por los discos de cerámica que incorporan y suponen un gran ahorro de agua.

Bimando

A diferencia de los anteriores, los grifos bimando son aquellos que incorporan dos mandos. Con uno se maneja el agua fría y con el otro, el agua caliente. Son muy comunes y dos de sus principales ventajas son su propia estética (le dan un toque rústico a la estancia) y la gran variedad de modelos que hay para elegir en el mercado. 

Termostático

Los grifos termostáticos son los que permiten que la temperatura del agua sea constante. De esta forma, no se ven afectados por la apertura de otros grifos del hogar y bloquean la salida del agua caliente si se produce un corte en la fría. A estas ventajas se le suma el ahorro que ofrecen: entre un 15 y un 20% de agua, y entre un 5 y un 20% de energía.

Tipos de grifo según su instalación

Grifos de repisa

Los grifos de repisa se instalan sobre la encimera del cuarto de baño o de la cocina. Son los más habituales en las viviendas y sus puntos a destacar son que resultan muy prácticos y que su instalación es de lo más sencilla.

Grifos murales y de empotrar  

Son los que van fijados a la pared, así como los que hay que instalar cuando las tuberías circulan por esta. Su principal ventaja es que ofrecen más espacio para manipular objetos. Además, resultan muy estéticos y le dan a las estancias del hogar un toque clásico.  

Tipos de grifo según su caño

En función del caño encontramos dos tipos de grifos: de caño alto o vertical y de caño bajo u horizontal. Los primeros, al separarse más del fregadero, facilitan un mayor espacio para apilar los platos y demás utensilios sucios. Mientras, los segundos son la opción perfecta cuando la ventana se sitúa justo delante del grifo.

Ambas alternativas son compatibles con los caños extraíbles. Ofrecen una gran comodidad, ya sea para fregar, lavar frutas y verduras o llenar de agua un cubo o recipiente que no quepa en el fregadero. Tan solo tendrás que enfocar el chorro al lugar preciso, evitando así desperdiciar agua.

Como ves, hay una gran variedad de grifos y todos ellos cuentan con sus propias ventajas. ¿Por cuáles te decantarás?