Cada vez es más frecuente ver grifos negros en las cocinas y en los cuartos de baño. Se trata de una tendencia en alza que en los últimos años parece haberse asentado. Y es que este acabado en pequeñas porciones aporta un toque sobrio, discreto y elegante a cuya elección te será difícil resistirte.
Grifería negra para el baño de tu casa
La grifería es un elemento más de los cuartos de baños. Estos, por lo general, están revestidos de baldosas claras, por lo que los grifos negros tienden a centrar el protagonismo en ellos. Puedes complementarlos con otros accesorios del mismo color, como un radiador toallero en negro. ¿Qué te parece la idea?
Para contribuir a su mantenimiento y evitar que la cal del agua los acabe estropeando, en su limpieza puedes utilizar remedios caseros de lo más efectivos. Por ejemplo, empapa un algodón en vinagre o en jugo de limón y frótalo en aquellas zonas donde la cal se acumule.
Grifería negra para la cocina
La grifería negra es menos común en las cocinas que en los cuartos de baño, pero no por ello son menos recomendables. Este color lo puedes encontrar en grifos de diferentes tipologías: monomando, con un único mando para regular la temperatura y el caudal del agua; bimando, con un mando para el agua fría y otro para el agua caliente; extraíbles, de estilo antiguo…
Asimismo, en las cocinas, la grifería negra suele acompañarse por un fregadero del mismo color. Si no te acaba de convencer la idea y buscas otra tendencia a seguir, ¿qué te parecería optar por un fregadero de cerámica rústico? Jugarás con la tradición y la modernidad, consiguiendo un espacio único y diferente.
Otros colores que elegir para tu grifería
Además del negro, puedes optar por un sinfín de colores, como por los más llamativos. Los rojos, verdes, naranjas o morados son ideales para transmitir alegría y diversión en un baño infantil. También para darle un aire juvenil a la estancia en la que se coloquen.
Igual de sobrio y discreto que el negro es el blanco. Ofrece amplias posibilidades en cuanto a decoración al combinar perfectamente con muebles de color madera, lavabos de porcelana blanca… Por ello, no supone una apuesta muy arriesgada si eres una persona más bien clásica y no te gusta innovar demasiado.
Una última opción son los grifos acabados en oro. Para adquirir esta tonalidad se les aplica un baño de oro de 24 quilates, ¿lo sabías? Eso sí, para que la superficie se mantenga como el primer día y no se raye, es muy importante que en su limpieza no uses estropajos. Mejor utiliza un paño humedecido en algún producto natural.
Como ves, los grifos negros son opciones ideales tanto para las cocinas como para los cuartos de baño, por lo que si tienes planeada algún tipo de reforma en tu hogar, puedes plantearte ponerlos. Seguro que el resultado te encantará y sorprenderá gratamente a tus invitados. Además, tienes numerosos modelos entre los que elegir. Tantos, que te será difícil decantarte por uno.