Usar gel de ducha durante el baño sirve para relajar las tensiones de la faena diaria, lo mejor de todo es que puedes prepararlos en casa sin necesidad de ser un experto. Una opción muy conveniente para aquellos que no les gusta usar productos comerciales.
Sin embargo, sugerimos que consultes con un dermatólogo si tienes piel sensible o presentas alguna patología. Te explicamos paso a paso cómo hacer geles de ducha caseros.
1. Gel de ducha básico
Todo parte de la base, esta es la clave para elaborar varios tipos de geles de ducha. Así las cosas, presta atención y elige un aceite esencial. Ten presente que los hay para relajar, humectar, hidratar, entre otros. Los más conocidos son el de lavanda, limón, menta y rosa, por ejemplo.
Necesitarás
- Agua mineral, un litro.
- Gel antibacterial sin fragancia, 100 gramos.
- Pectina en gel, 60 gramos.
- Aceite esencial de tu elección, 40 gotas.
- Botella de plástico.
- Cuchara de madera.
Hazlo paso a paso
- En una olla, hierve el agua mineral y deja que llegue al punto de ebullición.
- Vierte el gel antibacterial en la olla y baja el fuego al mínimo.
- En ese punto incorpora la pectina en gel.
- Mezcla los ingredientes hasta lograr una combinación homogénea.
- Retira la olla del fuego y agrega las gotas de aceite esencial.
- Espera a que enfríe, y verifica su consistencia. Si queda muy líquido agrega un poco más de pectina y en el caso contrario vierte un poco más de agua.
- Embotella el producto y disfruta de tu creación.
2. Gel de ducha de aloe vera
El aloe vera es un planta que aporta muchos beneficios a la piel, entre ellos destaca la suavidad.
Necesitarás
- Agua mineral o destilada, 750 mililitros.
- Jabón líquido de castilla, 50 gramos.
- Pectina en gel, 30 gramos.
- Pulpa de aloe vera o gotas de aceite esencial de la planta, 40 gramos o 25 gotas según el caso.
- Una botella de plástico con atomizador.
- Un cuchara de madera.
Hazlo paso a paso
- Pon el agua a hervir hasta que llegue al punto de ebullición.
- Incorpora el jabón al agua y baja el fuego al mínimo, déjalo de este modo por 30 minutos.
- Quita la olla del fuego y agrega la pectina, revuelve con ayuda de la cuchara de madera hasta que se disuelvan todos los grumos existentes.
- Vierte la pulpa de aloe vera procesado o las gotas de aceite esencial.
- Revuelve de nuevo con la cuchara de madera hasta combinarlo todo muy bien, y deja la mezcla en reposo.
- Vierte el producto en la botella y colócala en el área de la ducha para su uso.
3. Gel de ducha de glicerina
La glicerina es un hidratante muy bueno para la piel, y hacer un gel con este producto te permitirá escoger el aceite esencial de tu preferencia.
Necesitarás
- Jabón líquido de glicerina, 400 mililitros.
- Sal común, ½ cucharadita.
- Aceite de jojoba, 1 cucharada.
- Aceite esencial de tu preferencia, 30 gotas.
- Un botella de plástico limpia y seca.
Hazlo paso a paso
- Agarra la botella de plástico y vierte el jabón de glicerina en ella. Asegúrate de que esté limpia y seca.
- Incorpora en la botella el agua destilada y la sal, estos dos ingredientes fungen como diluyente y preservante en la preparación.
- En ese punto, vierte el aceite de jojoba y las gotas del aceite esencial.
- Cierra la botella y bate vigorosamente hasta que los ingredientes se unan.
Algunas cosas quedan mejor si las hace uno mismo, además de ser ecológicas y ayudar al planeta. El gel de ducha puede ser una de ellas si respetas las cantidades recomendadas. En caso de que percibas una reacción en la piel suspende el uso inmediatamente. Anímate a preparar tus propios geles y consiéntete mientras te das un baño.