¿Estás pensando en hacer una reforma integral en tu cuarto de baño? Entonces, uno de los elementos sobre el que debes decidir es la ducha. ¿Tendrá un sistema monomando o termostático? ¿Será fija o lateral? Descubre todas las opciones que existen para hacer la mejor elección.
Sistema monomando y termostático
Ateniéndonos a la grifería de ducha, podemos hablar de sistema monomando y de sistema termostático. El primero es el más simple. Con una única palanca se regula hacia arriba o abajo el caudal del agua; y hacia los lados la temperatura de la misma. Mientras, el segundo consta de dos mandos. Uno a cada lado.
Lo mejor del grifo termostático es que puedes mantener seleccionada la temperatura del agua sin tener que regularla cuando te duchas. Eso sí, si el nivel de cal del suministro de agua de tu hogar es elevado y no cuentas con un descalcificador, es preferible que te decantes por grifos monomando.
Duchas fijas
Con este tipo de duchas sentirás que están lavándote bajo la lluvia. El sistema más simple y común es el de columna de ducha. Esta, a su vez, puede ser expuesta o empotrada. Consta de un rociador fijo, de una ducha de mano o telefonillo, y de un grifo o mezclador de agua generalmente termostático.
Lo ideal es que el rociador se sitúe veinte centímetros por encima de la cabeza de la persona más alta de la vivienda. Además, si quieres que el agua caiga con más fuerza, puedes optar por un rociador de techo. Los hay de una amplia variedad de diseños y precios.
Teleducha
Son prácticas, versátiles y de diferentes medidas, por lo que seguramente encontrarás aquella que mejor se adapte a tu ducha. Las hay hasta con forma cuadrada o de color cambiante en función de la temperatura del agua. Impresionante, ¿verdad?
La teleducha consiste en una grifería de ducha monomando o termostática; un flexo con rociador (la mayoría permite seleccionar entre varios tipos de salida del chorro del agua) y un soporte para el mismo que se fija en la pared a la altura que se desee. Todo ello puede ir instalado en una barra.
Dos ventajas de la teleducha son su precio asequible y la flexibilidad que permite. Podrás manejar el rociador cómo desees: sujetándolo y moviéndolo con la mano o fijándolo en un soporte para que el agua caiga desde arriba.
Duchas laterales y columnas de hidromasaje
¿Quieres aumentar el confort y acercarte a la experiencia que ofrece una cabina de hidromasaje? Entonces, puedes decantarte por un sistema con rociadores laterales empotrados en la pared a la altura de las cervicales, de las dorsales y de las lumbares. Es posible instalar los elementos individualmente o de forma conjunta a través de la colocación de una columna de hidromasaje.
Esta opción es más práctica que una bañera de hidromasaje por diversos motivos: es más barata, ocupa menos espacio y ofrece los mismos beneficios. Es decir, reduce dolencias como la artritis; el estrés y la ansiedad; los niveles de azúcar en sangre o la presión arterial. ¿Se puede pedir más?